DR. LUIS GUERRERO MARTÍNEZ
CHOLULA
PEÑA BERNAL
LOS CABOS
CALAKMUL
TEPEPAN- PUEBLO
AVENIDA INSURGENTES
TEOTIHUACAN
POPOCATÉPETL E IZTACCÍHUATL
AMACUILÉCATL
CERRO DE XOCHITEPEC
IZTACCÍHUATL
DÍA DE MUERTOS
NEVADO DE TOLUCA
LA CABEZA Y TEYOTL
LA SIERRA DEL AJUSCO
IZTACCÍHUATL MAJESTUOSO
CALAKMUL
Luis Guerrero M.


Calakmul es uno de los sitios arqueológicos más impresionantes que nos ha dejado la cultura precolombina. Hay varias razones para afirmar esto: la inmensidad y diversidad arquitectónica de sus edificaciones, la imponente interacción con la selva, y la enorme riqueza histórica que encierra.

Reino de Kaan o Cabeza de Serpiente (por su glifo emblema), fue uno de los principales dominadores de las tierras bajas del mundo Maya en el periodo clásico (aproximadamente del 300 al 900 de nuestra era). Su nombre actual Calakmul, fue puesto por su explorador, el botánico estadounidense Cyrus Longworth Lundell, refiriéndose a las dos elevaciones que componen la orografía del lugar: Ca (dos), lak (juntos), mul (montículos). Otro nombre, el original, es Uxte’Tuun (“tres piedras”), el cual aparece en varias de las inscripciones de la ciudad.

Por su extensión y urbanización, Calakmul es considerada la ciudad más grande de la cultura maya e incluso de todas las zonas conocidas del mundo precolombino. El núcleo urbano es superior a los 20 kilómetros cuadrados, y se asienta en un domo natural, a orillas de un akalche (aguada de gran tamaño), con una bien planeada red de canales para aprovechar sus aguas y evitar en lo posible las inundaciones; estos canales fueron hechos por los habitantes que edificaron la ciudad en la época clásica. Entre templos, palacios, adoratorios, juegos de pelota y zonas habitacionales, se han descubierto cerca de siete mil estructuras. Un sacbé o camino de estuco, rodeaba la ciudad y otro salía de ella en dirección norte. En Calakmul se han encontrado 117 estelas (el mayor número de la región), numerosos enterramientos de los que se han extraído objetos ceremoniales funerarios. Se calcula que llegó a tener cerca de sesenta mil habitantes.

En el mapa geográfico contemporáneo, Calakmul se encuentra al Sur del estado de Campeche en México, muy cerca de la frontera con Guatemala, forma parte de la Reserva de la Biosfera de Calakmul, con más de 700,000 hectáreas. En el año 2002 fue nombrada, por la UNESCO, Patrimonio Cultural de la Humanidad.

La zona donde se asienta Calakmul estuvo habitada desde el siglo V a.C., y algunas de las principales edificaciones se hicieron un siglo antes de nuestra era; su época de mayor influencia abarcó los siglos IV a IX de nuestra era. Gracias a las estelas, pinturas y otros restos arqueológicos se ha podido reconstruir una parte importante de su historia. Calakmul rivalizó y tuvo alianzas con importantes ciudades, como Caracol, Naranjo, Yaxa, Tikal, Palenque y Dos Pilas. Es importante destacar la rivalidad con Tikal, pues asociada a ella se encuentran su esplendor y su caída.

Antes que Calakmul se convirtiera en el reino más poderoso, Tikal dominó toda la zona baja del territorio maya. La primera gran derrota de Tikal está asociada al reinado de Testigo Celeste (561-572) en Calakmul. Desde su inicio tuvo la intención de ampliar el poder del Reino de Kaan. La ocasión fue la invasión de Caracol por Tikal, siendo rey de Tikal, Wak Chan K'awiil o Ave Doble, capturando y dando muerte al regidor de Caracol. Como reacción a esta invasión, Calakmul realizó una alianza con Caracol y derrotó a Tikal en el año de 562. Se cree que en alguna de esas batallas perdió la vida Wak Chan K'awiil. Tanto por su poder e influencia política y militar, como por su fuerza comercial y de intercambio cultural, Calakmul se convirtió por esa época en la ciudad más importante de la zona, conocida como Cuchcabal Cabeza de Serpiente, o Reino de Kaan.

Tikal fue nuevamente invadido por Calakmul en 657. Finalmente el rey de Tikal, Jasaw Chan K’awaill logró derrotar en 695 a Calakmul y sus aliados. Después de esta derrota dejaron de erigirse en Calakmul estelas o inscripciones relacionadas con invasiones o triunfos bélicos. Comenzó entonces su decadencia, aunque fue hasta el siglo X que la gran ciudad comenzó a ser abandonada.

Como la mayoría de las ciudades precolombinas de Mesoamérica, la arquitectura de Calakmul está íntimamente ligada a una cosmovisión religiosa y política, donde se suman sus conocimientos astronómicos, sus creencias, la ostentación del poder, las necesidaes comerciales, la interacción con la naturaleza que los rodea y el intercambio cultural con otras ciudades.

La ciudad tiene dos grandes referentes urbanísticos la Gran Plaza, fundada en el Preclásico tardío, y la Gran Acrópolis hacia principios del Clásico tardío; en ambas plazas están ubicadas las principales edificaciones. La Gran Plaza contiene un bien armado conjunto de edificaciones: La principal y más alta es la Estructura II, al sur; también ahí se encuentran la estructura VII, al Norte; la estructura V, al noroeste; la estructura VI, al oeste; las estructuras III y IV, al este. La Gran Plaza se comunica con diversos barrios residenciales mediante calzadas.

La estructura II fue edificada con una gran suma de significaciones: representa una Montaña Sagrada –es la más alta del lugar, se calcula que llegó a tener una altura de 60 metros-, con una escalinata principal, acompañada a los lados por mascarones de gran tamaño, los cuales representaban la unión entre las deidades y el linaje dominante. En las habitaciones superiores el gobernante o Ahaw se comunicaba con los seres superiores. Contaba también con túneles, los cuales representaban el descenso a Xibalba. Esta estructura también fue usada como complejo funerario. Entre otros fue sepultado Yuknoom Yich’Aak K’ak’, “Garra de Fuego”, en su recinto mortuorio se encontraron diveroso objetos que dan cuenta de la grandeza ritual con la que fue enterrado.

La estructura IV es una gran plataforma donde se asientan tres edificios. Esta estructura tiene una orientación astronómica, que permite medir el calendario solar, mostrando los solsticios de verano e invierno. La plaza en conjunto también servía como un reloj solar.

En el año 731 d.C. el gobernante Yuknoom Tok’ K’awil trasladó el centro político de Calakmul a la Gran Acrópolis, donde destacan la estructura XX y un Juego de Pelota. La estructura XX contaba con tres corredores, en uno de ellos se descubrió una tumba con diversas ofrendas. También en este edificio hay restos de pinturas murales y se encontraron diversos motivos marinos: corales, conchas, espinas de mantarraya.

La experiencia al visitar Calakmul es muy especial. Tiene una concurrencia mucho menos masiva que otros sitios arqueológicos de importancia. Además de su majestuosidad, tiene el gran plus de la interacción con la biosfera en donde se encuentra. En la visita que realizamos en 2008, tuvimos varias experiencias que pueden ayudar a ejemplificar esto último. En una de las plataformas de la estructura II nos encontramos merodeando a una pareja de zorros espino, poco después escuchamos el alboroto de los monos aulladores, el escándalo continuaba y más adelante un lugareño nos comentó que ese nerviosismo de los monos se debía a que en la zona estaba un puma, un poco antes de salir de la zona arqueológica nos topamos con un enorme y bello pájaro carpintero de color azul. En un momento de nuestro recorrido, debido a la inmensidad del lugar nos encontramos desorientados, sin poder salir de una de las zonas para acceder a otra. Todas estas experiencias son solamente una pequeña parte del impacto que Calakmul puede ofrecer hoy en día a sus visitantes.


Calakmul: orgullo de Mesoamérica. La estructura II es una de las más altas de la arquitectura Maya.

Los mascarones de la estructura II eran parte de su simbolismo político-religioso. La zona arqueológica de Calakmul tiene una extensión de más de 20 Km², con bellos caminos para el turista.

Calakmul tiene 120 estelas correspondientes al periodo Clásico. La inmensidad de la reserva de la biósfera
de Calakmul marca el horizonte visual desde
sus edificaciones superiores.

En diversas partes de Calakmul se encuentran antiguas zonas habitacionales. Su arquitectura imponente no solamente se refleja en sus grandes pirámides, también en su concepción urbana.

Las estelas de Calakmul son
una crónica de su grandeza histórica.
La Gran Pirámide es testigo de la lucha
interminable entre el poder de la selva y
las edificaciones humanas.


Fotografías:
° Luis Guerrero Martínez
° Luis Antonio Guerrero V. (Toto)

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